La familia Donnahoo tiene un largo historial de donaciones a los Hospitales Shriners para Niños. No es sorprendente que Robert “Bob” Donnahoo, un Shriner de segunda generación, siguiera el ejemplo de sus padres, Penny y el fallecido Bob Jr. , al donar su tiempo y dinero. Ahora, los hijos adultos de Bob también están contribuyendo con los Hospitales Shriners para Niños.
Hace casi 20 años, Bob se convirtió en Shriner, el mismo año en que su padre estaba a punto de ser el Potentado o presidente de Crescent Shriners, en el sur de Nueva Jersey. Bob había crecido viendo a su padre ser un Shriner activo. Su padre formó parte de la Junta de Gobernadores del Hospital Shriners de Philadelphia y fue su tesorero. Bob una vez más, siguió a su padre formando parte de la Junta de Gobernadores. Durante su tiempo en la Junta, sus hijos donaban dinero de manera discreta a esa organización que tanto importa a su familia.
Un momento de orgullo
“Uno de mis momentos más memorables fue en una reunión de la junta hace varios años cuando tuve un reconocimiento con un premio como donante, solo que éste no era para mí”, comentó Bob. “Mi hija, Carolina, venía haciendo donaciones de manera discreta – sin que yo lo supiera – hacía una donación en lugar de un pago por un automóvil todos los meses, y ese premio como donante era de ella. “Hay pocos momentos que me emocionan mucho, pero éste fue uno de ellos. Mi hijo, Ian, siempre ha hecho donaciones de la misma manera, incluso mientras estaba en la universidad con fondos limitados. Recientemente, la novia de mi hijo dirigió su campaña de caridad de la hermandad para el hospital, recaudando más de $23,000. Mi sobrino [planeaba correr una] maratón en noviembre de 2019 y la aprovechó para recaudar fondos para el hospital”.
Mantener la misión
Más importante aún, Bob piensa que el tiempo dedicado a hablar sobre los hospitales es imperativo. El hecho es que el costo de la atención médica seguirá aumentando. Aunque nuestro equipo está muy enfocado en la eficiencia en la entrega de la atención, cuesta mucho dinero administrar todas nuestras instalaciones. Necesitamos que los donantes nos ayuden a seguir cumpliendo esta misión. Lo que hace que Bob se sienta aún más orgulloso, es que sus hijos adultos y su familia sean los líderes del futuro y ya han dado un paso al frente. “Una de las cosas más importantes que pueden influir en los posibles donantes, es la visita a uno de nuestros centros de atención – sus vidas cambiarán para siempre cuando vean la pasión y el cuidado que nuestra gente brinda a los niños día tras día”, comentó Bob.
PARA APOYAR nuestro sistema de salud a través de su patrimonio, comuníquese con la oficina de donación planificada y principal al 813-367-2241 o [email protected]