“¡Sigue tus sueños!” “¿Qué quieres ser cuando seas grande?” “¡Puedes hacer todo lo que te propongas!” Estos mensajes son tan comunes en la infancia como los helados y los cereales. Pero para los niños que enfrentan un diagnóstico médico complejo o una lesión grave, estas aspiraciones pueden parecer fuera de su alcance.
Durante más de 100 años, Shriners Children’s ha brindado una transformadora atención médica que ayuda a los niños en su camino hacia un futuro brillante. Nuestros pacientes sueñan en grande y sus logros son superiores. Se convierten en empresarios, profesores, médicos y pilotos. Son atletas profesionales y oradores motivacionales.
Por cada paciente que se enfrenta a lo que parece un camino incierto por delante, hay otro allanando, el camino hacia la grandeza. Estas son solo algunas historias de estos jóvenes extraordinarios.
Steven se enfrenta al fuego
Steven recibió tratamiento para las quemaduras y ahora domina las competencias de Strongman.
Steven lleva su vida en la piel. La tinta de más de 14 tatuajes se encuentra junto a líneas en relieve, protuberancias y remolinos. Cada cicatriz es como un mapa que puede seguirse hasta el accidente que cambió su cuerpo para siempre.
Steven sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en la mayor parte de su cuerpo después de que una fuga de gas provocara una explosión en su casa en Virginia Occidental, cuando tenía 14 años. Durante tres meses recibió tratamiento en Shriners Children’s Ohio.
“Fue realmente frustrante”, recuerda. “Recordaba cómo caminar, comer y levantar cosas, pero mi cuerpo no cooperaba”.
Steven ahora es bombero, 17 años después de su accidente.
Steven atribuye el mérito a su familia y a su equipo de atención médica por haber encontrado la motivación adecuada: el deporte. “Empezamos poco a poco lanzando una pelota”, afirma. “Sabían que practicar deportes era muy importante para mí, así que sentí que estábamos logrando algo juntos”.
Después de que fue dado de alta, Steven quería una actividad que fuera desafiante tanto física como mentalmente. La encontró en las competencias de Strongman y ha pasado los últimos seis años compitiendo y triunfando en estos eventos. Ocupó el segundo lugar en la competencia West Virginia’s 2020 Strongman y fue nombrado el “Miami’s Baddest Man” en 2021.
Este hombre fuerte puede levantar una piedra de 330 libras sobre su cabeza y llevar un yugo de 800 libras a lo largo de 50 pies. “El hecho de que tenga un aspecto diferente no significa que alguien deba subestimar lo que mi cuerpo y mi mente son capaces de hacer”, afirma Steven.
Ahora, a sus 31 años, Steven tiene un nuevo desafío: combatir incendios. “Puede que el fuego me haya ganado la primera ronda cuando era niño, pero yo ganaré la segunda”, afirma.
Emmy lo deja todo en la pista de baile
Emmy alguna vez fue paciente y ahora dedica tiempo a visitar a los pacientes actuales y a trabajar como voluntaria en Shriners Children’s.
Emmy, de 19 años, padecía un dolor debilitante en la rodilla que sufrió durante su primera infancia. Nació con meniscos discoides, una rara afección en la que el cartílago en forma de C de la rodilla que actúa como amortiguador tiene forma ovalada o de disco.
A los 12 años, Emmy se había sometido a cinco cirugías de rodilla, pero el dolor se volvió insoportable. Temía no poder volver a hacer lo que más le gustaba: bailar.
Los padres de Emmy no estaban dispuestos a dejar que su hija se rindiera. El equipo de atención médica deportiva de Shriners Children’s Northern California ayudó a Emmy a retomar el camino de su pasión.
“Parecía una locura”, afirma Emmy. “¡Nunca pensé que volvería a bailar!”
Emmy no solo volvió a las pistas, sino que incluso tuvo una temporada como bailarina profesional. Emmy atribuye sus éxitos a las dos cirugías de rodilla, las horas de terapia física y el ánimo interminable que recibió del personal de Shriners Children’s. Afirma que el equipo la ayudó a alejarse del dolor y volver a bailar.
“En Shriners Children’s me decían que yo podría volver a bailar”, afirma Emmy. “Me devolvieron la vida”.
Matthew se dedica a devolver lo que recibe
Matthew se ha convertido en un exitoso empresario y ahora se lo retribuye a Shriners Children’s.
Cuando Matthew tenía dos años, un terrible accidente le causó quemaduras de tercer grado y lesiones importantes en la mano. Fue trasladado de urgencia a Shriners Children’s Boston desde su estado natal, New Hampshire, para recibir atención especializada en quemaduras. Matthew fue paciente durante más de 15 años. Durante ese tiempo, se sometió a decenas de cirugías para reconstruir su mano, así como a terapia física intensiva para mejorar su función.
“Al recordar mi difícil comienzo en la vida, me doy cuenta de que no se trata de lo que te sucede en la vida, sino de lo que haces con ello”, afirma.
Con el deseo de ayudar a pacientes como él, Matthew volvió a conectarse con Shriners Children’s Boston como adulto. Es el exitoso propietario de una empresa de fotografía y videografía que presta servicios a más de 400 bodas al año. Matthew ha donado los servicios de fotografía y de cabinas de fotos instantáneas con divertidos accesorios de su empresa para las fiestas de los pacientes y para el principal evento de recaudación de fondos del hospital, el “Boston Haunted Walk”.
Incluso corrió la maratón de Boston en honor a la atención médica que recibió por quemaduras cuando era niño, aunque lo hizo de una forma creativa. La pandemia de COVID-19 provocó una reinvención de la preciada carrera en 2020, en la que los corredores eligieron su propio recorrido de 26.2 millas. Matthew cruzó su línea de meta en Shriners Children’s Boston para recaudar fondos y generar conciencia sobre el hospital que le dio la esperanza y la recuperación necesarias para alcanzar sus sueños.
En Sus Propias Palabras
Pacientes actuales nos hablan de sus esperanzas y sueños para el futuro, inspirados en los increíbles logros de antiguos pacientes.
“Aspiro a ser porrista de los Dallas Cowboys. Mi pasión por este deporte comenzó cuando era una niña y estoy comprometida en alcanzar ese nivel de atleta de élite, a pesar de la lesión que tengo en la rodilla. Después de la cirugía, nunca me sentí tan fuerte y versátil como bailarina”Bridget, 15 | SHRINERS CHILDREN’S NEW ENGLAND
“Quiero ser piloto porque podría llevar a personas de todo el mundo a destinos que les encanten y eso los haría felices”.
Kayson, 8 | SHRINERS CHILDREN’S OHIO
“Creo que sería genial diseñar prótesis para animales o desarrollar páginas web para usuarios ciegos o con discapacidad visual”.
Grace, 15 | SHRINERS CHILDREN’S FLORIDA
“Quiero ser artista. ¡Me encanta dibujar y me inspira la naturaleza! Quiero utilizar el arte para animar a la gente”.
Wen, 10 | SHRINERS CHILDREN’S SHREVEPORT
“Quiero trabajar en la industria equina. Disfruto entrenar, montar y todo lo demás que tenga que ver con caballos. No se me ocurre nada que me haga sentir más feliz”.
Madison, 16 | SHRINERS CHILDREN’S LEXINGTON
“Quiero expresarme creativamente en el arte de la actuación porque me encanta interpretar personajes. La actuación da una perspectiva diferente de ver la vida”.
Solomon, 16 | SHRINERS CHILDREN’S HAWAI’I
“Quiero diseñar videojuegos e incluso estar en BattleBots algún día”.
Dash, 8 | SHRINERS CHILDREN’S TWIN CITIES
“Quiero dedicarme al cultivo de flores y ayudar a la comunidad de donde soy. Me gusta ver cómo crecen las flores y cultivarlas. Estudio ingeniería en innovación agrícola sostenible”.
Maria, 18 | SHRINERS CHILDREN’S MEXICO
“El trabajo de mis sueños es el de terapeuta ocupacional en Shriners Children’s. La atención que he recibido me ha demostrado lo importante que es ayudar a los demás a sentirse cómodos y a tener éxito sin importar su diagnóstico o lesión. Quiero ser esa persona para alguien más como Shriners Children’s lo fue para mí ”.Sydney, 18 | SHRINERS CHILDREN’S PHILADELPHIA
